“Los seres humanos siempre han buscado el paisaje en estado puro y han construido allí con el fin de percibir el universo y sentir su propia mente. (…) Es como cuando se recita un poema exquisito. Cada verso es diferente del siguiente, pero juntos dan la totalidad. De la misma manera, nuestro edificio es un poema hecho con diferentes materiales y con edificios diferentes que forman una totalidad en armonía con el espíritu del lugar.” Jørn Utzon (*1)
Primer proyecto
En 1970, Utzon realiza la primera versión de su vivienda en el acantilado, a la que llama Casa Olicia. La vivienda se organiza sobre un muro trasero que se quiebra sobre sí mismo y avanza envolviendo el espacio exterior hacia el acantilado. A él se adosa una galería porticada y una serie de elementos. Dos de los cuerpos avanzan sobre el acantilado, girando y buscando su proyección al mar a través de los nichos abocinados, que ya planteaba en esta primera versión.
El proyecto presentaba unas bóvedas delante de las troneras, y en éstas se crean espacios estanciales rehundidos en el suelo. Esta versión se dibuja tras la propuesta para la Escuela de Herning (1969), donde Utzon ya planteaba este tipo de bóvedas, a su vez deudora de su interés en la arquitectura islámica.
Segundo proyecto
Utzon presenta en 1971 el proyecto básico al Ayuntamiento de Santanyí para solicitar licencia. El proyecto se organizaba de manera sensiblemente ortogonal respecto al contorno del acantilado. Los tres elementos principales de la vivienda aparecen unidos por un pórtico abierto al mar, que los agrupa en forma de “U”. Los cuerpos diferenciados de sala, cocina-comedor y dormitorio principal quedan así articulados.
La relación con el pórtico solamente es plena en el elemento central, que encara al mar a su través. Los demás tienen una relación lateral a través de los accesos a sus patios privados y puertas adyacentes. Un segundo pabellón de dormitorios se sitúa independiente. Nuevamente aparecen las troneras que embocan al mar y se vuelven a plantear bóvedas.
Propuestas de 1972
En la primera propuesta de 1972, Utzon abandona definitivamente una implantación con un orden rígido, los elementos se desordenan adaptándose a la topografía de la terraza del acantilado. La idea de una edificación más unitaria, tal y como había concebido hasta ahora, desaparece para transformarse en una serie de pabellones situados a lo largo del acantilado.
La disposición de los elementos sigue manteniendo al edificio de la cocina-comedor en el centro, entre la sala y el dormitorio principal, mientras el segundo dormitorio cierra la composición en el otro extremo. El pabellón de cocina-comedor presenta una galería porticada frontal que conservará hasta fases avanzadas. La parte trasera de la vivienda permanece con un carácter residual en este proyecto, salvo el patio de la sala, y el acceso desde la calle está muy indefinido. Esta propuesta se llegó a desarrollar a escala 1:50. (*2)
El último plano de implantación conocido pertenece ya a su segundo proyecto de 1972. La disposición se aproxima mucho más a la definitiva, pero Utzon sigue manteniendo una idea bastante diferente en cuanto a la forma del edificio de la cocina-comedor, que se sitúa ya en el extremo suroeste. La última pieza existente en la actualidad, con el recinto del tendedero original, no aparece más que insinuada en el trazo de la prolongación del muro trasero.
El resto de pabellones alcanza su ubicación definitiva, aunque no su conexión. Tanto el acceso como el recorrido trasero de la vivienda aparecen muy indefinidos y, desde luego, mucho menos articulados y significativos que en la solución final. Solamente el patio de la sala se relaciona con la unidad a la que sirve y está separado del resto de la zona trasera, que permanece como un espacio algo residual.
El acceso cubierto que conduce al vestíbulo del mosaico de la media luna, que articula la entrada, y el recorrido trasero con la creación de unos patios será lo último que se formalice en la implantación. Sin embargo, ya no habrá ya más planos de implantación, solo estudios parciales. Utzon nunca dibujará un plano final completo de Can Lis. Con la creación de esos patios se producirá la comprensión dinámica de la vivienda a través del recorrido por esas unidades fragmentadas, y al dar acceso a cada unidad a través de los patios dotará de una nueva dimensión aún más emocionante al eje de visión del mar. (*3)
Reconsideración de las propuestas de implantación
En el primer proyecto, Utzon esboza la situación primordial que se da en el borde del acantilado: el pequeño pinar y su sombra, la terraza rocosa, el sol y el mar. Utzon traslada ese orden al muro trasero protegido por pórticos que abraza al espacio natural que se abre al mar. No hay materialidad todavía, pero ya aparecen las troneras. La implantación es mucho más indefinida y menos sutil con el lugar. Se impone una continuidad que crea una cierta barrera entre la tierra y el mar. La inclusión de bóvedas en contraposición a los elementos abocinados no hace más que entrar en conflicto, al restarse fuerza entre sí.
En el segundo proyecto, las piezas se individualizan pero se disponen de manera ortogonal y falta permeabilidad al paisaje. El orden es algo rígido y, de nuevo, la fuerza de la cubierta introduce temas secundarios contraproducentes. La relación del pórtico dominante con los pabellones y sus patios traseros es lateral y, aunque presenta cierto interés, resulta poco articulada y confusa tanto en recorrido como en gradación espacial de la relación con el mar.
En las versiones finales de 1972 las piezas adquieren su independencia y se asientan sobre el terreno del acantilado buscando su orientación. Desde el punto de vista de la implantación, la naturaleza penetra en la vivienda y el orden creado ensalza y pone valor la relación entre los edificios, el lugar y el horizonte. La vivienda no es un objeto exento que se ha posado, sino que va a formar parte fundamental del territorio, al absorberlo y modificarlo. Así se crea el recinto del hombre, que pone en valor el orden natural.
Utzon escribió en 1964 una carta a la administración municipal de Pittwater para defender la tercera propuesta de su vivienda en Bayview, que habían vuelto a rechazar al proyectar 3 pabellones independientes. Utzon explicaba su decisión de esta manera, con ciertas afinidades al proceso posterior en Can Lis:
“La idea tras el esquema era evitar hacer un único gran edificio que conectara 3 funciones diferentes, y al hacer una gran unidad de este tipo, destruir el paisaje, talar los árboles, etc. Desde el punto de vista del paisaje existente, es preferible tener tres unidades más pequeñas”. (4*)
En una conversación con Henrik-Sten Møller, Utzon manifestaba la elección de sus intereses en la implantación, a la vez que daba su visión de las intenciones en algunos maestros:
“Yo podía ver claramente que Le Corbusier proyectaba edificios para pasear alrededor y mirarlos, mientras que Alvar Aalto diseñaba edificios en los que uno debía entrar. Hay una gran diferencia, y yo he estado totalmente absorbido por todas estas posibilidades. Pero mi principal interés ha sido como tratar el importante espacio entre el exterior y el interior. Una cuestión muy particular. Desde el mar a la casa. De la naturaleza a lo artificial. De la terraza a la sala, de lo público a lo privado. (*5)
Si te ha interesado esta nueva historia de Can Lis, te espero en la siguiente, donde abordaré historias del interesante proceso de construcción.
(1*) UTZON, Jørn. 1990. Extracto de la memoria de su proyecto no construido de un centro de visitantes para la interpretación del paisaje en Samsø.
(2*) Para un mayor conocimiento de cada proyecto y su definición, se puede consultar el capítulo 2 de la primera parte de mi tesis doctoral: EL Proceso proyectual de Can Lis, en: la huella de la arquitectura de Jørn Utzon a través de esta obra. Tesis Doctoral (2015), E.T.S. Arquitectura (UPM).
http://oa.upm.es/40569/57/MANUEL_DE_LARA_RUIZ_02.pdf
(3*) Si se quiere profundizar en el sentido espacial fragmentado y la comprensión dinámica en los recorridos de Can se puede consultar un artículo mío sobre este tema.
http://oa.upm.es/37685/1/INVE_MEM_2014_203057.pdf
(4*) Extracto de la una carta de Jørn Utzon a las autoridades municipales de Pittwater, fechada en 1964, Reproducida en la revista Content 1, 1995.
(5*) Extracto de la conversación con Henrik Sten Møller en la trascripción contenida en: MØLLER, Henrik Sten; NAGEL, Per; UDSEN, Vibe (ed.). Jørn Utzon Houses. Copenhague: Living Architecture Publishing, 2006.
https://www.instagram.com/living_architecture_publishing/?hl=es
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