El arquitecto Pablo Paradinas nos hace llegar el siguiente texto.
!!A disfrutarlo!!
Cuando abordamos un nuevo proyecto miles de pensamientos cruzan nuestra mente, vamos a poner las palabras adecuadas a aquello que parece no tenerlas: el origen de las ideas en el proyecto de arquitectura.
Utilizaremos lo que hemos bautizado como “mecanismos proyectuales de ideación”. Para que una vez los hayamos interiorizado, emprendamos el siguiente viaje de proyectos arquitectónicos con la mochila cargada de nuevas herramientas.
Mecanismo 01. La experiencia.
Como todos sabemos, las vivencias personales nos van forjando la identidad poco a poco, estas experiencias debemos de utilizarlas a nuestro favor a la hora de proyectar, me explico: La materialización de las ideas es una lucha compleja, pero si atendemos a la descripción que nos regala Rainer Maria Rilke en su novela Los cuadernos de Malte Laurids Brigge sobre lo que significan las experiencias vitales y sobre el esfuerzo que supone llegar a esa primera palabra, podremos utilizar esta reflexión como herramienta de proyectos para el futuro.
Rilke argumenta que los versos no son sentimientos, son experiencias. Se necesitan multitud de experiencias para escribir un solo verso, hay que sentir el vuelo de los pájaros y conocer el movimiento de las flores para poder escribir esa primera palabra. Ese primer croquis en nuestro mundo arquitectónico. Esa primera palabra de Rilke es la esencia del proyecto de arquitectura, esta situación sobre el surgir del primer verso es, en la arquitectura, la idea y su origen, es el nacimiento de una idea.
El nacimiento de esta idea es un hito en nuestro viaje proyectual, un momento único en el que las estrellas se alinean y todo el trabajo parece tener coherencia y sentido, un hilo del que tirar en los momentos de duda, un acontecimiento mágico que según nos explicaba Rilke surge a raíz de la experiencia sentida.
Ejemplifiquemos ahora este mecanismo para hacerlo visible: La experiencia sentida de la que habla Rilke podemos entenderla como el recordar, cuando proyectamos, aquellas situaciones en las que la arquitectura nos ha emocionado, ¿recuerdas aquella primera vez que entraste en el Panteón de Roma? Pocos espacios en la historia de la arquitectura te van a hacer sentir un fuego interior tan intenso. Extrae de estas visitas arquitectónicas que has realizado, la esencia de los espacios visitados y aplícalas a tu proyecto. No confundas la esencia de un espacio con los formalismos del mismo, indaga sobre su construcción espacial y llegarás a una idea potente que desarrollar. Si comprendes su espacio comprendes su esencia.
Sin embargo, el nacimiento de una idea es un momento tan particular que no podría explicarse únicamente por el desarrollo personal de cada uno de nosotros. Existe un factor externo, una energía muy difícil de explicar pero que un joven Federico García Lorca se atrevió a denominar como el Duende.
Mecanismo 02. La magia.
“El duende es un poder y no un obrar, es un luchar y no un pensar. Es, más bien, un dejarse poseer, arrastrar y transformar. En lugar de querer prenderlo, dejar que sea él quien nos capture a nosotros porque somos sus siervos, pero también su canal y su medio. Para buscar al duende no hay mapa ni ejercicio, sólo se sabe que quema la sangre como un trópico de vidrios, que agota, que rechaza toda la dulce geometría aprendida, que rompe los estilos y hace que Goya, maestro en los grises, en los platas y en los rosas de la mejor pintura inglesa, pinte con las rodillas y los puños con horribles negros de betún. Es un poder misterioso que todos sienten y que ningún filósofo explica.”
Así, Federico García Lorca terminaba la famosa conferencia que tuvo por nombre “Juego y Teoría del duende” en la ciudad de Buenos Aires en el año 1933. En ella, fue capaz de ejemplificar la magia del arte, decía “la verdadera lucha es con el duende”, exponiendo la dificultad del acto creativo y el momento clave en el que surge la idea con la llegada del Duende, en el instante en el que todo parece seguir una línea lógica que no podría haberse desarrollado de otra manera, y que se siente empujada por este personaje misterioso.
Esta sensación es la que experimentamos al encontrar la primera palabra, al croquizar la esencia de la idea que debemos de desarrollar en el proyecto, pero no nos equivoquemos, la llegada del Duende se trabaja, se lucha y se persigue. El Duende no aparece de forma fortuita a quien no lo busca. El inicio de un proyecto de arquitectura es tan mágico que hace falta tanto de la experiencia como de la chispa inicial, ambas situaciones se deben de trabajar con intensidad.
El Duende de García Lorca no debes de confundirlo con un momento de inspiración fortuito, la inspiración no llega, se trabaja y se busca con ahínco. El Duende es un hito que sucede en el desarrollo del trabajo, un momento esquivo, extraño y especial, algo que marca un antes y un después y que hace que el proyecto no sea igual, porque, ¿acaso es el mundo igual después de la construcción del Panteón?, y ¿después de una pieza de Bach?
Por ello se conmemoran los hitos, no porque nos hagan ver el paso del tiempo, sino para saber que hay temporalidades que no pasan, y esas, son las que constituyen la esencia del proyecto de arquitectura.
Autor: Pablo Paradinas Sastre
Architect and PhD candidate UPM-ETSAM
Pablo Paradinas Sastre es Arquitecto titulado por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid (ETSAM sobresaliente 2020). Actualmente Doctorando en Arquitectura y Urbanismo (El Tiempo Cero como generador del Proyecto Arquitectónico, ETSAM).Colabora con la Cátedra Cerámica de Madrid y con la Unidad Docente Aparicio como Profesor Ayudante Mentor desde el año 2021.
Desde el año 2016 ha trabajado en importantes estudios de arquitectura como Linazasoro Sánchez Arquitectos, Aparicio Estudio de Arquitectura, Donaire Milans Arquitectos, Franklin Azzi Architectes Paris, Vírseda Vila Arquitectos, Abestudio Arquitectura, entre otros.
Desde el año 2020 coordina los congresos cerámicos que tienen lugar en la Escuela de Arquitectura de Madrid, colabora en la edición de las publicaciones anuales indexadas “Ensayos Sobre Arquitectura y Cerámica”.
Su labor académica e investigadora ha sido reconocida, entre otras, con la VIII Beca de Investigación en Nueva York (2022), de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Fundación Arquia; la Beca Cátedra Cerámica Madrid (2021), y la Beca “HNA ICONS” mediante la cual desarrolló el comisariado de la exposición “Grandes Maestros” que tuvo lugar en la Escuela de Arquitectura de Madrid (2018).
Como profesional independiente sus proyectos han sido reconocidos, entre otros, con el Primer Premio del 16ª Concurso de Ideas Cémex Cátedra Blanca (2018); Segundo Premio en el Concurso de Ideas para la Construccion de cuatro viviendas unifamiliares en Olivenza Badajoz (2018). Finalista en la IV edición del Concurso de Ideas “Microespacios Santander” (2020); Mención Especial en el Concurso de Ideas “Comisariado Menos 35 COAM” (2022); Primer Accésit en el Concurso de Ideas para el Comisariado de Itinerancias del Pabellón de España en la 18º Exposición Internacional de Arquitectura, la Bienal de Venecia (2023).
Sus proyectos y escritos han sido publicados medios y revistas como DOMUS Magazine 989 “La Cita dell Uomo”, “Agua Best Projects Selected” “Fuego Best Projects Selected”, “Faber Best Projects Selected” de Jesús Aparicio, “TOOLS Mecanismos de Arquitectura” de Alberto Campo Baeza, y “Trabas, Trazas, Tramas Best Projects Selected” de Justo Isasi.
Su trabajo ha sido expuesto en las exhibiciones “With the highest honors ETSAM” durante los años 2015, 2016, 2017 y 2018, así como en “Espacio Contemplación” dirigido por el arquitecto Benjamín Cano, en febrero de 2018.
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